Identifican a un hombre que recogía ilegalmente almeja en Teis con alerta por toxina para venderla

La Policía Local de Vigo ha identificado y propuesto para sanción a un vecino de la ciudad, M.A.M., de 77 años de edad, por extraer almeja de forma ilegal en arenales de la parroquia de Teis, y que fue sorprendido dos veces en dos días consecutivos realizando esta actividad.

Según han informado fuentes policiales, la primera intervención tuvo lugar a mediodía del pasado 1 de septiembre, cuando el 092 recibió un aviso para acudir a la playa de la ETEA, debido a la presencia de un 'furtivo' que estaba recogiendo marisco en una zona que, además está en veda y con un informe que alerta de toxinas.

Másnoticias

Cómo ver en Galicia la "luna de sangre", el eclipse lunar total de este domingo

06/09/2025

Así reabrirá una tienda del centro de Vigo con una apuesta por las camisetas retro de fútbol

06/09/2025

Cuando los agentes llegaron vieron al hombre, que al percatarse de su presencia salió del agua con una bolsa de plástico, con el marisco en su interior, y una pequeña azada. El sospechoso reconoció ante los policías que su intención era vender las almejas, aunque matizó que no sabía si había toxinas en el lugar.

Al día siguiente, poco antes de las 15:00 horas, otra patrulla acudió a la playa de A Guía, también en Teis, alertada por un nuevo caso de furtivismo. El sospechoso resultó ser el mismo varón identificado 24 horas antes.

Al hombre se le volvió a ocupar una bolsa que contenía 2,3 kilos de almejas y se le informó de que, dado que ya había sido advertido de que no podía realizar esa actividad, y que la zona estaba cerrada por riesgo sanitario, sería propuesto para sanción.

Por otra parte, ese mismo día, la Policía Local identificó a otro 'furtivo' en la playa de la isla de Toralla. El hombre, X.L.R., de 38 años de edad, fue sorprendido extrayendo percebe.

Según relató a los agentes, los 4,6 kilos de marisco extraído era para su propio consumo. No obstante, dado que el hombre no tenía licencia, se le incautaron los percebes, que fueron entregados a una entidad social de la ciudad.