Las multinacionales cierran sus tiendas en Rusia, pero Inditex todavía las mantiene abiertas

La invasión del Ejército ruso a Ucrania, que está causando ya la muerte de unos 2.000 civiles, según los datos de los servicios de emergencias, está derivando en un fuerte rechazo al gigante ruso. Más allá de las "enormes" sanciones en el campo económico que ha impuesto Occidente al Kremlin, multitud de multinacionales europeas están decidiendo paralizar su actividad en Rusia como gesto de rechazo al que es ya el mayor ataque militar a un Estado europeo desde 1945.

El gigante textil sueco H&M ha anunciado ya que suspende todas sus ventas en Rusia con motivo de la guerra emprendida por Putin. "El Grupo H&M está profundamente preocupado por los trágicos acontecimientos en Ucrania y apoya a todas las personas que están sufriendo", explicó en un comunicado oficial. También ha decidido cerrar sus tiendas Ikea. "La devastadora guerra en Ucrania es una tragedia humana, y nuestra más profunda empatía y preocupación están con los millones de personas afectadas", explicaba la empresa sueca en una nota oficial en la que comunicaba el cese temporal de operaciones tanto en Rusia como en Bielorrusia. Una decisión que afecta a unos 15.000 colaboradores de la compañía.

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A la medida se ha sumado Mango, que ha clausurado sus tiendas y dejado de operar en su tienda online, así como la británica Asos. También Nike y Apple han decidido suspender la venta de sus productos en territorio ruso, como respuesta al ataque militar emprendido por su Gobierno. En este escenario, el gigante textil gallego Inditex guarda silencio.

El imperio de Amancio Ortega cuenta con 527 tiendas en Rusia y, de hecho, es el segundo país del mundo donde más tiendas tiene, tras España. El grupo cuenta con 86 tiendas de Zara, 87 de Pull&Bear, 53 de Massimo Dutti, 106 de Bershka, 76 de Stradivarius. 63 de Oysho, 44 de Zara Home y 12 de Uterqüe. En total, cuenta con más de 9.000 trabajadores. La decisión para el grupo es compleja, ya que está especialmente expuesto en Rusia, que es uno de sus principales mercados. Al contrario de lo que han hecho otras grandes multinacionales, Inditex no se ha pronunciado oficialmente y no ha comunicado si pausará su actividad. Por ahora, sigue operando con normalidad.