La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha acordado emitir requisitoria de búsqueda, detención e ingreso en prisión con respecto a Borja F.F., acusado de un delito de agresión sexual a un varón en un aparcamiento de la ciudad olívica y que no se ha presentado este martes al juicio señalado por estos hechos.
Así lo ha acordado la sala, tras confirmar que ni siquiera su letrado ha podido ponerse en contacto con él, y que había sido correctamente citado. De este modo, se ha ordenado su búsqueda e ingreso en prisión provisional, en tanto no se celebre el juicio, para asegurar su presencia ante el tribunal y dado lo elevado de la pena que se solicita para él (un total de 11 años de cárcel).
Se da la circunstancia de que el acusado ya tuvo que ser buscado anteriormente, puesto que tampoco se presentó a la declaración indagatoria al final de la instrucción de la causa.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular piden que sea condenado a 11 años de cárcel por unos hechos que ocurrieron en la madrugada del 29 de mayo de 2022. Según el escrito de acusación pública, Borja F.F. abordó a la víctima en la calle y, con la excusa de que le invitaría a consumir cocaína, lo llevó hasta los baños del parking de Rosalía de Castro.
Una vez allí, intentó obligarlo a que le hiciera una felación, al no lograrlo, lo empujó y, haciendo uso de la fuerza, le bajó los pantalones y lo agredió sexualmente. Luego lo tiró al suelo y se fue del lugar, llevándose el teléfono móvil de la víctima. De este modo, las acusaciones le atribuyen los delitos de agresión sexual y de robo con violencia.
Agresión "muy violenta"
En declaraciones a los medios, una vez suspendida la vista, la víctima ha explicado que esa noche había bebido y estaba contrariado porque le habían hurtado el bolso. Según su relato, el acusado le abordó cuando él caminaba por la calle Oporto y se ofreció a ayudarle para encontrar sus pertenencias.
De este modo fue como lo convenció para entrar en el parking y llevó a cabo la agresión sexual, aunque el perjudicado ha matizado que solo lo conocía de vista y nunca antes había hablado con él. Con respecto a la agresión, ha recalcado que fue "muy violenta" y que el acusado le agarró de los pelos y le empujó contra una pared primero, y contra el suelo después, antes de irse con su teléfono.
Esa misma noche, el presunto agresor fue detenido y el juzgado acordó una medida de alejamiento de la víctima. No obstante, ha afirmado el perjudicado, volvieron a encontrarse en varias ocasiones por Vigo, y Borja F.F. se le "encaró". "No estoy bien, me han diagnosticado un trastorno de estrés postraumático", ha añadido.