Seis de las personas heridas durante el incendio registrado este pasado miércoles en un edificio en Vigo, en el que fallecieron cuatro personas, continúan hospitalizadas en diferentes centros sanitarios gallegos, dos de ellas en estado crítico.
Así se desprende de la última información de la Consellería de Sanidade, actualizada a las 12:00 horas, que asegura que cinco pacientes continúan ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Ribera Povisa de Vigo.
En concreto, dos heridos tienen una evolución "muy favorable", mientras que un paciente tiene pronóstico reservado y otros dos están en estado "crítico", aunque a las 20:00 horas del miércoles estaban en estado "muy crítico".
Por su parte, la niña de ocho años, hermana de los tres menores fallecidos, que está ingresada en la UCI del Hospital Materno-Infantil Teresa Herrera de A Coruña, está estable dentro de la gravedad.
El incendio se desató de madrugada, y los bomberos apuntan a que se inició en el vestíbulo del inmueble. Aunque los vecinos han señalado que el fuego fue intencionado y han apuntado directamente a un varón que vivió en edificio y fue expulsado "por conflictivo", el delegado del Gobierno y las fuentes policiales han matizado que es prematuro confirmar esa hipótesis, mientras los investigadores siguen trabajando.
En concreto, la Policía Nacional ha informado de que no se ha llevado a cabo "ninguna detención" ni se prevé, por el momento, ningún arresto, aunque no ha descartado ni ha confirmado que haya intencionalidad en los hechos.
Además de las cuatro personas fallecidas, los servicios sanitarios atendieron 'in situ' a siete personas, una de las cuales solicitó el alta voluntaria. Asimismo, fueron trasladadas inicialmente a centros hospitalarios nueve personas, incluyendo al padre de los niños fallecidos y la hija menor de la pareja. Sin embargo, tres heridos