El Concello de Vigo ha confirmado el retraso en la apertura de los chiringuitos de las playas, que no llegarán a tiempo para el inicio de la temporada, y ha culpado a la Xunta de "retrasar la autorización", aunque la administración autonómica ha matizado que el consistorio pidió dichas autorizaciones fuera de plazo.

Fuentes municipales han señalado que la Xunta no otorgó el permiso hasta el pasado 13 de mayo, de modo que se ha tenido que retrasar la tramitación para licitar un nuevo contrato. Las mismas fuentes han asegurado que se están llevando a cabo los trámites "con toda la celeridad posible", pero insisten en que "el problema es el retraso con el que ha llegado la autorización de la Xunta de Galicia".

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"Ignoramos la razón por la que lo hicieron, pero dado lo que está sucediendo, no descartamos que haya sido intencionado", han acusado, y han explicado que, por contra, el informe de Costas (del Gobierno de España), "llegó a principios de febrero".

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Solicitud fuera de plazo

Por su parte, fuentes de la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático han informado de que el Concello solicitó la autorización para la instalación de cinco chiringuitos en las playas (de los 11 que instalará solo esos cinco dependen de autorización del servicio autonómico de litoral, el resto son autorizados por la administración central). Esta solicitud fue realizada "con carácter extemporáneo", ya que el plazo para pedir ese permiso, según la normativa en vigor, es en el último trimestre del año anterior y el Concello hizo la solicitud el 17 de enero de 2025. Según el decreto 97/2019, han explicado, la presentación fuera de plazo implica la inadmisión, a no ser que se considere necesario para garantizar la adecuada prestación de los servicios. Con todo, han insistido desde la Xunta, se tramitó igualmente la solicitud "con celeridad", requiriendo los correspondientes informes vinculantes al Servicio Provincial de Costas del Estado y elaborando los correspondientes informes técnicos.

Así, la resolución favorable fue comunicada al Concello el pasado 13 de mayo, por lo que esos cinco chiringuitos, cuya instalación depende de la Xunta, están autorizados. "Más allá de los trámites que tenga que llevar a cabo el Concello, la Xunta cumplió, tramitando y autorizando con celeridad, aunque el consistorio no hizo la solicitud en plazo", han apostillado.