Caldeiras do Castro, un rincón para rendirse ante la naturaleza de Galicia a 90 minutos de Vigo

Una pequeña ruta con escaleras de madera que te llevarán a los pies de una frontera natural de Galicia. Portugal cuenta con numerosas opciones de senderismo que ofrecen espectaculares vistas gracias a la instalación de pasarelas por escarpados lugares como los Passadiços de Orvalho, Mondego, Paiva o el Trilho dos Gaios, pero no es necesario cruzar el río Miño para disfrutar de una caminata que te hará enamorarte de la naturaleza, ya que las Caldeiras do Castro invitan a disfrutar de un espectacular paisaje fluvial gallego que se crea en Muxía.

En la provincia de A Coruña, a poco más de una hora y media en coche desde Vigo, encontraremos en la parroquia de Coucieiro de Muxía esta pequeña ruta con escaleras de madera que te llevarán a una “cascada y una serie de piscinas naturales que llaman la atención al visitante”, aseguran desde el Concello. Siendo la frontera natural entre esta localidad y Dumbría, el río Castro crea a su paso por esta zona una serie de pozas, ideales para darse un baño cuando el tiempo acompaña, que, por su forma, recuerdan a “caldeiros”, de ahí el nombre de Caldeiras do Castro que recibe este enclave.

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Para llegar a esta cascada, que durante el invierno y la primavera suele lucir más espectacular por su caudal, hay que coger la carretera AC-440 que va de Muxia a Fisterra. Al pasar Moraime habrá que continuar dirección Vilarmide, Coucieiro y, “después de recorre aproximadamente 12 kilómetros, encontraremos el desvío hacia el Área Recreativa de O Castro”, explican desde Turismo de Galicia. En este lugar, que posee un amplio merendero con mesas y zona verde para comer al aire libre, se podrá dejar el vehículo y, desde ahí, realizar un pequeño tramo final a pie que nos llevarán a las escaleras de madera que salvan un desnivel de ocho metros de alto para llegar a los pies del río.

Además de las Caldeiras do Castro, en el entorno se puede admirar una pequeña capilla de 1660, Santo Eutel de O Castro, y un espectacular cruceiro que “conserva una inscripción que hace referencia a los fundadores del santuario”, explican desde el Concello.

Pero si en vez de quedarnos en el río Castro disfrutando de la cascada o dándonos un baño en sus “caldeiras”, la intención es seguir caminando y descubriendo los parajes naturales de Muxía, existe la opción de realizar la ruta “Caldeiras do Castro – Couceiro”, que comienza en este mismo punto. Además, en el recorrido de 10 kilómetros por varios núcleos interiores del municipio se podrán ver “magníficas viviendas, entre ellas dos casas hidalgas con escudo, o la iglesia de Coucieiro, una construcción barroca de la primera mitad del siglo XVIII, en la que se conservan tres interesantes retablos”, destacan desde el Concello.