Este verano toca columpiarse. La moda de los enormes columpios con vistas espectaculares, en entornos únicos o con encanto particular, aflora en cada rincón de Galicia, también de Portugal. Desde hace semanas, el municipio fronterizo de Vila Nova de Cerveira, situado en la orilla portuguesa de Miño frente a Tomiño, a unos 45 minutos de Vigo, cuenta con un espectacular columpio gigante con vistas panorámicas del río Miño y su desembocadura en el Atlántico.
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Este nuevo atractivo, iniciativa de las freguesias de Vila Nova de Cerveria y Lovelhe con el apoyo de la cámara municipal, busca divulgar las increíbles vistas que existen en el Mirador do Cervo. Bautizado como “CerLove” se ha convertido ya en estrella de los instagramers y las redes sociales, con decenas de menciones y fotografías.
Inaugurado el 2 de julio, ofrece vistas al propio municipio de Cerveira, a su vecino gallego en Tomiño, a buena parte del cauce del Miño y a su desembocadura entre Caminha y A Guarda, flanqueado por el Monte Trega.
El columpio de Vila Nova de Cerveira se encuentra además junto a otro de los grandes atractivos de este extraordinario mirador. Se trata de O Cervo, una obra del artista José Rodrigues, inaugurada en1985. Se encuentra en la zona más alta del municipio, en la cima del monte do Crasto, en la Serra da Gávea. Este venado es ya un emblema de Cerveira y, de hecho, protagoniza una bella leyenda que se ha transmitido con el paso de los años de generación en generación.
Cómo llegar al columpio de Cerveira
La escultura de O Cervo y el propio columpio de “CerLove” están en la Serra da Gávea, muy cerca del centro urbano de Vila Nova de Cerveira. Para llegar a la cima del monte, a unos 300 metros, existe una carretera asfaltada, así como senderos que desembocan directamente en este mirador.
Tan solo debemos seguir las indicaciones que nos dejarán a los pies del ciervo en una zona que cuenta además con espacio de aparcamiento. Una vez en la cima podremos disfrutar de una brutal panorámica del Río Miño.
