La leyenda Iggy Pop brinda un concierto apoteósico en Vigo: 90 minutos de locura y rock en Latitudes

Vigo está viviendo uno de los mejores veranos de conciertos de su historia. Iggy Pop fue el encargado de engrandecer ese listado anoche. Su carisma, su puesta en escena, la inmensidad de su voz y, sobre todo, esa singular y única forma de moverse sobre el escenario permitieron a las miles de personas que se daban cita pasadas las 22:00 horas de ayer sábado en el Peirao de Trasatlánticos presumir, por siempre, que vivieron, saltaron y disfrutaron en Vigo del directo de una de las grandes leyendas del rock.

El concierto arrancó con puntualidad británica. A las 22:15 horas sonaban los primeros acordes firmados por Noveller, una de las integrantes de su banda. No hubo que aguardar demasiado por el padre del punk rock. Segundos antes de las 22:20 horas, las miles de personas que abarrotaban el Peirao de Trasatlánticos recibían a lo grande a Iggy Pop, enfundado en un traje negro sin nada que ocultar bajo las telas. Pasos sobre el escenario frenéticos, movimientos locos, sin ningún tipo de lógica. Era el momento de que la locura y el caos llenasen la escena. La chaqueta acaba pronto besando el suelo y el torso del estadounidense acabaría protagonizando esa estética que también forma ya parte de su leyenda.

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Iggy Pop firmó uno de esos conciertos que quedarán grabados en la historia de Vigo. Si a principios de agosto destacábamos aquella frase de "Yo estuve en el concierto de Sting en Castrelos", algo similar va a suceder con la memorable actuación firmada por el artista estadounidense. El mito del rock, que ya dejó huella en Galicia en 2019 en O Son do Camiño, volvió a demostrar que sigue en plena forma. Una voz espectacular y una energía desbordante permitieron al Festival Latitudes cerrar por todo lo alto una edición en cuyo cartel había otros grandes espadas como Two Door Cinema Club y Mando Diao (ambos actuaron en la primera jornada) y The Vaccines, que se subieron al escenario del Peirao de Trasatlánticos tras el recital apoteósico de Iggy Pop.

Cuando uno habla de Iggy Pop no puede eludir el paso del tiempo. El que fue "frontman" de The Stooges apenas ha sufrido el paso del tiempo. Lógicamente, no estamos ante esa imagen de chico fibroso de hace varias décadas, pero el padre del punk rock derrocha un directo con una puesta en escena bestial. El estadounidense siempre rompe las reglas. Y anoche también lo hizo en Vigo, con 90 minutos en el que, curiosamente, se medía en propuesta de ocio con el enfrentamiento entre Celta y Real Madrid. Los futboleros fieles se perdieron un concierto histórico, un Iggy Pop eterno que en esa hora y media que estuvo sobre el escenario hizo un ejercicio de respeto hacia el presente, otorgando protagonismo en su repertorio a temas de su último álbum, "Free" (2019).

Pero en esa locura que se desató durante algo más de hora y media en el Peirao de Trasatlánticos también hubo espacio para los grandes éxitos de la leyenda del rock. Iggy Pop encadenó "Lust For Life" y "The Passenger" para desatar la locura en el Peirao de Trasatlánticos, una velada única e inolvidable en el que el norteamericano, con esa melena y ese "pecho lobo" a lo Tarzán, se atrevió a hablar en castellano. "Los españoles tienen ritmo y yo también", expresó ante los vitores de un público entregado.

Cerveza volando entre el público o una guitarra eléctrica hinchable motivaban e inyectaban energía a Iggy Pop, cuyas caderas tan solo seguían su lógica. ¿O sería Iggy Pop el que incendiaba a las masas? Lo cierto es que la leyenda que ayer brilló en la urbe gallega acabó, tras hacer sus habituales piruetas con el micrófono, que acabó besando el suelo, preguntando a los asistentes un escueto. "¿Todo bien?" Nadie respondía. No hacía falta. Acababan de vivir uno de los mejores conciertos de sus vidas.

La velada en el Peirao de Trasatlánticos continuó con The Vaccines, que acabó por confirmar la excelente acústica de un Festival Latitudes que se prolongó más allá de las 02:30 horas con Silvia Superstar DJ. Antes del norteamericano, se subieron al escenario Furious Monkey House y Aphonnic.