La derrota sigue siendo un hábito para el Celta de Juan Carlos Unzué. El equipo vigués deja buenas sensaciones, merece más, pero su falta de acierto en las dos áreas le impide dar el zarpazo definitivo en la clasificación. El cuadro celeste volvió adelantarse en el marcador. Anotó Maxi Gómez un golazo, pero falló tres ocasiones muy claras que impiden al equipo vigués sacar algo positivo de su visita al Sánchez Pizjuán.
Juan Carlos Unzué ha encontrado su once tipo. Se puede recitar de carrerilla. El equipo está perfilado. Las dudas de inicio de temporada se han disipado. Apenas hay debate. Rubén Blanco se ha ganado el puesto mientras Sergi Gómez y Cabral son la pareja ideal para el eje de la retaguardia del Celta. En la sala de máquinas también se han terminado los dilemas. Lobotka es el timonel de un centro del campo en el que Daniel Wass y Tucu Hernández le han ganado el sitio a Jozabed Sánchez.
El guardameta mosense justificó pronto la confianza del Unzué. Una gran intervención del canterano evitó que el Sevilla diese el primer golpe. El Celta se mostraba valiente. Sabía que el equipo de Berizzo, en plena transición, podía mostrarse ansioso si el partido se le volvía en contra.
El cuadro celeste rompió la balanza. Llegó en una acción a balón parado y con Pione Sisto como el mejor 'camarero' del gol de LaLiga Santander. Maxi Gómez, una de las revelaciones de la competición, aprovechó la asistencia del danés para batir a Soria y presentar, de forma definitiva, la candidatura del Celta para tomar y desatar todas las alarmas en el Sánchez Pizjuán.
La grada hispalense se exasperaba. El Celta tenía el partido donde quería. Dominaba en el marcador y jugaba con esa ansiedad de un rival que no se asienta en el estilo futbolístico que quiere el añorado Eduardo Berizzo. Maxi Gómez perdonó. El partido entraba en esa tónica extraña. Esa inercia del indulto suele llevar implícito el castigo del adversario, que igualaba la contienda en la recta final del primer acto por mediación de Muriel.
Mazazo visitante. Se pasaba del posible cero a dos (incluso se anuló un gol a Pione Sisto) al empate. El gol andaluz cambiaba la iniciativa. De la ansiedad al arreón local para remontar el gol de Maxi Gómez. Nolito pudo certificar el volteo en el electrónico, pero otra intervención de Rubén Blanco evitó el tanto del sanluqueño.
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— RC Celta (@RCCelta) 18 de noviembre de 2017
El Celta comenzó bien el segundo acto. Perdonó de nuevo Maxi Gómez y, poco después, Nolito, inteligente, remataba en el segundo palo un centro de Sarabia. El andaluz, ídolo hace año y medio, se convertía en esta ocasión en vergudo. Son las cosas del fútbol. El sanluqueño no celebró el tanto para homenajear su pasado glorioso en Vigo.
El equipo de Unzué no bajó los brazos. Siguió buscando el empate. Maxi Gómez volvió a fallar en dos acciones casi idénticas. el uruguayo cazó dos rechaces, pero no estuvo atinado en la ejecución. Para el recuerdo quedan dos errores que impiden al Celta, por lo menos, arañar un punto de su reencuentro con el Sevilla de Eduardo Berizzo y Nolito.
Los cambios de Unzué tampoco surtieron efecto. Radoja no mejoró la aportación de Lobotka y la apuesta de Brais Méndez como lateral izquierdo restó profundidad por esa banda. No obstante, un potente chut de Daniel Wass en un libre directo que casi aprovecha Hugo Mallo.
Al final, el Celta se reencuentra con la derrota. Sigue sin encadenar dos victorias seguidas. El despegue se pospone de nuevo. Las sensaciones mejoran. Es capaz de tutear e incluso poner contra las cuerdas a una de las potencias como el Sevilla. Pero, tal y como sucedió ante el Atlético de Madrid, le falta el acierto en ambas áreas para poder estar peleando por estar en la zona noble de la clasificación.
Sevilla: Soria; Corchia (Kjaer, 74'), Geis, Lenglet, Escudero; N'Zonzi, Pizarro, Franco Vázquez (Banega, 64'); Sarabia, Nolito (Krohn-Dehli, 83') y Muriel.
RC Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Cabral (Brais Méndez, Sergi Gómez, Jonny; Lobotka (Radoja, 69'), Tucu Hernández, Wass, Iago Aspas, Sisto (Guidetti, 78') y Maxi Gómez.
Goles: 0-1: Maxi Gómez (13'); 1-1: Muriel (36'); 2-1: Nolito (48')
Árbitro: Del Cerro Grande (comité madrileño). Mostró tarjeta amarilla a Corchia, Pizarro y Soria por parte del Sevilla mientras que por parte del Celta vieron cartulina amarilla Iago Aspas y Jonny. Expulsó a Robert Moreno, segundo entrenador del Celta (36').
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