Vigo gana puntos para ser sede del Mundial tras la renuncia de Málaga y la parálisis de A Coruña

Balaídos no se rinde en la carrera hacia el Mundial del año 2030. Pese a que todo parecía indicar que el estadio municipal de Vigo se quedaba fuera del listado para acoger partidos en la mayor competición de este deporte, la ciudad acaba de sumar unos puntos tras la renuncia de Málaga. Este mismo sábado, el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, ha anunciado la decisión: "Lo más sensato hoy es renunciar a la candidatura de la ciudad al Mundial del 2030".

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Pese a que la noticia ha sido muy sonada, no es algo del todo sorprendente. El propio regidor malagueño explicaba en su comparecencia que si presentaron la candidatura era porque el objetivo de tener un nuevo estadio quedaba lejos en el tiempo y parecía asumible. Sin embargo, las obras que requiere esta meta ponen ahora en peligro el proyecto del club local: "Si hay que elegir entre el Mundial y el club, nosotros elegimos el Málaga Club de Fútbol y la afición".

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Esta decisión se toma después de evaluar los costes que tendría para la ciudad y, especialmente, para el club tener que reformar La Rosaleda, tanto por la inversión necesaria como por la pérdida de ingresos al reducir el aforo durante las obras. Una polémica que lleva sobrevolando Málaga algún tiempo, ya que ni los tiempos ni las cuentas parecían cuadrar en un proyecto que no avanzaba. Eso sí, Francisco de la Torre ha asegurado que aunque no sea para el Mundial, habrá un nuevo estadio.

¿A Coruña sigue?

Otra de las sedes sobre las que no hay demasiadas novedades es la de Riazor. De forma similar a lo que sucedía con Málaga, A Coruña no ha anunciado ningún nuevo paso para las obras del estadio. Y, de hecho, hace una escasa semana El Larguero (Cadena SER) ya avanzaba que "la RFEF siempre ha dicho que había dos sedes que tenían serio riesgo de quedarse fuera: A Coruña y Málaga". Tras la caída de La Rosaleda, el proyecto de Riazor parece todavía paralizado.

Balaídos gana puntos

El estadio vigués fue uno de los que se quedaron a las puertas de entrar en aquella polémica lista sedes para el Mundial 2030. Todavía sin resolver qué criterios llevaron a excluir Balaídos de esta selección, ahora su candidatura gana fuerzas para sustituir a Málaga. Sin embargo, Valencia parte como favorita para ocupar el lugar de La Rosaleda. Una decisión que dependerá de la Real Federación Española de Fútbol en coordinación con la FIFA, todavía con cinco años por delante que pueden dar para muchos cambios.

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